Saturno – Pablo Alborán
Pablo Alborán, uno de los artistas más reconocidos de la música pop y balada en español, lanzó en 2017 su conmovedora canción “Saturno” como parte de su álbum “Prometo”. Este tema ha logrado tocar las fibras más sensibles de quienes lo escuchan, gracias a su profundidad emocional y su interpretación cargada de sentimientos. El videoclip oficial de “Saturno”, lanzado poco después, ha logrado complementar de manera visual la atmósfera nostálgica de la canción, convirtiéndola en una obra de arte audiovisual.
La Letra: Reflexión sobre el Dolor y la Pérdida
“Saturno” es una balada que nos sumerge en el universo emocional de Pablo Alborán, donde se aborda la pérdida, el dolor, y la búsqueda de una reconciliación con el pasado. A lo largo de la canción, el cantante malagueño describe un anhelo profundo por aquellos amores que se han ido, pero que siguen presentes en su corazón. Alborán utiliza a Saturno, el planeta, como una metáfora para el distanciamiento emocional y la separación entre dos almas que alguna vez estuvieron unidas.
Desde el primer verso, la letra ya transmite una sensación de tristeza y melancolía:
“Que los ángeles te cuiden esta vez, y prometo darte todo lo que sé, solo quiero que confíes otra vez.”
Esta introducción refleja la desesperación por salvar un amor que parece haberse roto, pero también está impregnada de una cierta resignación. La canción no solo se centra en el dolor, sino en una especie de aceptación de que, aunque se desee recuperar lo perdido, puede que el momento para ello haya pasado.
El estribillo es uno de los momentos más potentes de la canción, en el que Pablo Alborán expresa ese distanciamiento:
“Y cuando vuelvas habrá guerra, pero mis manos serán de hierro para ti. Y aunque el tiempo muera, nuestros nombres seguirán allá en Saturno.”
En estos versos se evidencia cómo el amor entre las dos personas ha quedado en suspenso en un lugar lejano, en otro mundo o dimensión, que para Alborán es Saturno. Este planeta es una alegoría del lugar donde las almas pueden encontrarse nuevamente, aunque sea solo en un plano simbólico.
El Videoclip: Belleza Visual y Metáforas Cósmicas
El videoclip oficial de “Saturno”, dirigido por Manuel Huerga, es una pieza que lleva la narrativa de la canción a un plano más elevado, utilizando elementos visuales que se alinean con el tema espacial y existencial de la letra. El video fue filmado en blanco y negro, lo cual intensifica la sensación de melancolía y le da una estética minimalista que resalta las emociones crudas que transmite la canción.
La elección de representar a los personajes y al propio Pablo Alborán como figuras flotando en el espacio es una metáfora directa del distanciamiento emocional que el cantante siente. Los personajes parecen estar desconectados, flotando en un universo infinito y desolado, donde el contacto entre ellos es imposible. Las imágenes de Saturno y los cuerpos celestes representan el tiempo, la distancia, y las barreras invisibles que separan a las personas cuando el amor se enfría o se desvanece.
Además, el videoclip presenta escenas en las que se muestra a Pablo tocando el piano, instrumento que ha sido un símbolo constante de su estilo musical, cargado de sensibilidad. La imagen del piano en un paisaje vacío refuerza la idea de soledad y reflexión introspectiva que domina la canción.
Una Canción Íntima y Personal
“Saturno” es una de las canciones más íntimas y personales de Pablo Alborán, y su interpretación es impecable. La voz del cantante logra transmitir un abanico completo de emociones, desde la desesperación hasta la esperanza. Es precisamente este equilibrio entre vulnerabilidad y fuerza lo que hace que “Saturno” se sienta tan auténtica y cercana a quienes la escuchan.
Musicalmente, la canción mantiene la esencia de las baladas clásicas de Alborán, con una instrumentación sencilla pero efectiva. El uso del piano como instrumento principal crea una atmósfera envolvente y emocional que permite que la voz de Pablo sea el foco principal. Además, la orquestación en el fondo, con cuerdas que van creciendo progresivamente, añade un toque de épica al estribillo, subrayando la magnitud de los sentimientos que se están expresando.
El Éxito de “Saturno” y su Significado en la Carrera de Pablo Alborán
“Saturno” se convirtió rápidamente en una de las canciones más populares de Pablo Alborán tras su lanzamiento. La canción no solo tuvo éxito comercial, sino que también fue elogiada por la crítica por su profundidad lírica y su interpretación vocal. Este tema consolidó aún más a Alborán como uno de los cantautores más importantes de habla hispana, conocido por su capacidad para conectar con sus fans a un nivel emocional profundo.
El tema aborda temas universales como el amor perdido, el paso del tiempo y el anhelo de reconciliación, lo que ha permitido que millones de personas en todo el mundo se identifiquen con la canción. La combinación de una letra poética, una interpretación vocal apasionada y un videoclip visualmente impactante ha hecho de “Saturno” una de las piezas más memorables en el repertorio de Alborán.
Conclusión: Un Viaje Emocional que Trasciende el Tiempo y el Espacio
“Saturno” es mucho más que una balada romántica; es un viaje emocional y espiritual que nos invita a reflexionar sobre nuestras relaciones, nuestros recuerdos y la importancia de aceptar lo que ya no podemos cambiar. A través de su música, Pablo Alborán nos lleva a un lugar de introspección, donde las emociones más profundas encuentran su expresión en las palabras y la música.
El éxito de “Saturno” no solo reside en su calidad musical, sino también en su capacidad para resonar en los corazones de aquellos que han experimentado el amor, la pérdida, y la esperanza. Es una canción que, sin duda, seguirá siendo una de las favoritas de los seguidores de Alborán y un testamento del talento del cantautor español para capturar la esencia de las emociones humanas.
Saturno
Vuelves en cada sueño que tengo,
caigo de nuevo en tu red.
Sé que tarda un tiempo
curarme de ti, de una vez.
Tuve tantos momentos felices
que olvido lo triste que fue,
darte de mi alma,
lo que tú echaste a perder.
Yo no quería amarte,
tú me enseñaste a odiarte,
todos los besos que me imaginé
vuelven al lugar donde los vi crecer.
En Saturno viven los hijos que nunca tuvimos,
en Plutón aún se oyen gritos de amor.
En la Luna gritan a solas tu voz y mi voz
pidiendo perdón, cosa que nunca pudimos hacer peor.
Tienes la misma culpa que tengo,
aunque te cueste admitir
que sientes como siento,
la almohada no suele mentir.
Yo no quería amarte,
tú me enseñaste a odiarte,
todos los besos que me imaginé
vuelven al lugar donde los vi crecer.
En Saturno viven los hijos que nunca tuvimos,
en Plutón aún se oyen gritos de amor.
En la Luna gritan a solas tu voz y mi voz,
pidiendo perdón, cosa que nunca pudimos hacer peor.